martes, junio 19

SOY SÚPER MILLONARIO


No se cómo decirlo, pero en los últimos meses me he ganado tanto dinero que no se qué hacer con él. Ocurre que la primera gran noticia me llegó hace como tres meses y por cierto en idioma inglés: era que me había ganado 10 millones de libras esterlinas porque la Coca Cola había hecho un sorteo entre los correos e-mail y el mío había resultado ganador con una clave. Ese día hasta le pedí ayuda a un compañero de trabajo para que me ayudara a traducir y éste me dijo "parece real". Respondí y me dijeron que tenía que escribirle al gerente de promociones para que me dijera dónde me entregarían el premio, pero opa, opa, el final del correo era de Yahoo y no de la Coca Cola como debería ser para una transnacional. Claro que era una ESTAFA en la cual han caído muchas personas que se van hasta el país que les dicen después de haber dado no se cuántos miles de dólares en concepto de IMPUESTOS y DOCUMENTOS.
Ya prevenido, hace una semana me llegó otro correo. Esta vez era de una empresa fabricante de llantas en la cual me avisaban que en otro sorteo similar había ganado 20 millones de dólares y que tenía que dar varios pasos para reclamar el premio. Mi respuesta fue: Por favor lo donan a una institución caritativa.
Así que mucho ojo. No se crean millonarios cuando les llegue este tipo de correos porque son ESTAFAS disfrazadas.


miércoles, junio 6

20 años atrás...











En 1987 viajé a Italia invitado por el padre Odorico D'Andrea, quien en ese tiempo era el párroco de San Rafael del Norte, y un Comité de Solidaridad con Nicaragua.

Me hice acompañar de una delegación de pobladores de ese municipio ubicado en el norte de Nicaragua y conversamos con los comités de Solidaridad, que eran coordinados por Linda Santilli, una amiga del pueblo nicaragüense desde esos aciagos tiempos.

¿Cómo ha pasado el tiempo? En mi memoria todavía está fresco ese viaje y la guía que nos hizo Elbano D'Andrea, sobrino del padre Odorico. Recordar cuando estuve acostado en un viñal comiendo uvas, bebiendo vino casero y después manejando por una autopista de Italia porque el guía se sentía mareado y llegar al lago de Como y caminar por los puentes de Venecia.

Había perdido toda comunicación con Linda e hice todo lo posible por contactarla. Mandé un mensaje a un periódico italiano y suerte, ella respondió preguntando tantas cosas.